El dinero no es lo más importante en el posible arribo de Gustavo Matosas a la Sele. El técnico uruguayo está dispuesto a ganar menos de una tercera parte de lo que obtenía en México.
Matosas tuvo en México un salario de unos $160.000 (¢95 millones) al mes; es decir, casi $2 millones al año, pero en la Federación se encontró una propuesta económica que rondaría los $50.000 (¢30 millones): ¿Qué hizo que se bajara tanto su sueldo?
En la negociación, que aún no se ha cerrado, la Federación le propuso hacerlo debutar al frente de una Selección Nacional y no de cualquiera, una que ya tiene una estructura montada y cuenta con todas las facilidades para ir a Catar 2022.
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También es su oportunidad para relanzar su carrera luego de su paso por el Atlas de México, el Al-Hilal de Arabia Saudí, el Cerro Porteño de Paraguay y Estudiantes de Argentina.
Además, los jugosos premios por clasificación a la Copa del Mundo y una remuneración económica si se obtienen títulos como Copa Centroamericana, Copa Oro y hasta donde se avance en una eventual Copa del Mundo.
En ese punto en específico, económicamente hablando, la Federación quizás no empata, pero sí equipara un poco la suma que Matosas está acostumbrado a ganar mes a mes.
Hay otros rubros, pero no son tan determinantes como los anteriores, pues se le dan a cualquier entrenador, no solo de Selección Nacional, sino de cualquier club, como comodidades de casa y carro, así como permitirle tener a una persona de su confianza en el cuerpo técnico.
Esos cinco aspectos jugaron a favor del suramericano para que se impusiera el proyecto por encima del dinero.
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Rodolfo Villalobos, presidente de la Fedefútbol, explicó que en todas las entrevistas realizadas, la parte financiera fue el último punto que se tocó.
“En todas las entrevistas fue el último tema porque estábamos claros que, ante la calidad de técnicos con los que estábamos hablando, más que una parte económica, Costa Rica quería ser un buen proyecto deportivo para ellos. Un buen proyecto justifica un cambio en otros aspectos que pueden ser importantes”, expresó Villalobos.
Un punto a favor de Matosas es que no es manejado por algún agente o intermediario, por lo que los aspectos de montos económicos y cláusulas son tratados directamente con él. “Con Gustavo tuvimos la oportunidad de manejarlo todo directamente con él, eso es un punto muy favorable porque es una relación entre la Federación y Gustavo”.
Para Villalobos, la experiencia de escuchar a reconocidos entrenadores en el continente como Matosas, Víctor Manuel Vucetich, Ignacio Ambriz y Luis Fernando Suárez fue enriquecedora.
“Nos valoran mejor afuera que como nosotros nos valoramos aquí adentro. A veces los ticos somos muy fuertes con nosotros mismos. Fue toda una experiencia escuchar a técnicos de afuera sobre cuál es la percepción que tienen de lo que significa la Selección de Costa Rica para un técnico y nos dimos cuenta con la cantidad de currículos y de nombres importantes que llegaron”, concluyó.