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Gustavo Matosas fue confirmado como técnico de la Selección de Costa Rica para el proceso de Catar 2022, un reto que aceptó con la clara intención de acabar con los resultados negativos que lo han acompañado desde el 2015.
El estratega uruguayo, luego de su brillante paso por el León mexicano, en el que consiguió ascenderlo y hacerlo bicampeón, no ha podido repetir ese éxito en escuadras como el América de México, Cerro Porteño de Paraguay o Estudiantes de la Plata de Argentina.
Todavía cuando pertenecía a León vivió dos polémicas que caracterizaron su carrera: una con el jugador mexicano Nery Castillo y otra con Juan Carlos Rojas.
Con Castillo tuvo un enfrentamiento en medios de comunicación, cuando el deportista manifestó que el trato del timonel con sus dirigidos no era el correcto.
“Los invito a que vayan a un entrenamiento, que vean todo el entrenamiento, no cinco minutos o diez, para que vean cómo insulta, cómo trata a los jugadores y esas son cosas que a mí no me gustaban”, dijo en declaraciones reproducidas por el MedioTiempo.com en 2013.
En ese momento, el estratega solo dijo: “Simplemente entiendo la frustración que puede generar no ser tenido en cuenta, pero no es de ahora. Lamentablemente no pude hacerlo jugar y le deseo que siga su camino. Yo estoy contento porque mi grupo y el vestuario está excelente”.
Por otra parte, con Juan Carlos Rojas la situación tuvo consecuencias más fuertes y provocó que el jugador fuera retirado del primer plantel de León.
"El torneo se acabó para el Romita. El lateral derecho del León tuvo una fuerte discusión con el entrenador Gustavo Matosas y fue separado del primer equipo y ahora, Juan Carlos Rojas, se entrenará con la categoría Sub-20 hasta que concluya el torneo”, informó ESPN en abril del 2013.
Según Ezequiel Gasca, periodista quien cubría el conjunto verde, todo nació por la forma en que Matosas le llamó la atención al jugador en una práctica.
Los pasos del uruguayo desde que dirigió a la Fiera han sido muy cortos y todos caracterizados por salidas llenas de hermetismo.
Matosas llegó al América para el primer semestre del 2015; con las Águilas consiguió hacer una buena fase regular en la Liga MX; sin embargo, en la liguilla quedó eliminado a manos del Pachuca.
Luego del análisis que hizo el América, no se llegó a un acuerdo para su continuidad, ya que la versión oficial indicó que habían diferencias con el proyecto deportivo.
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“Parece que Ricardo Peláez, quien era el presidente, tenía otra visión de equipo diferente a la que Matosas quería, entonces por ahí anduvo la cosa”, dijo Édgar Contreras del diario Reforma de México.
De hecho, varios medios recalcaron en ese momento que el timonel no quería en su equipo a futbolistas como Darwin Quintero, Paolo Goltz, Paul Aguilar y Darío Benedetto.
El periódico mexicano Milenio, en su suplemento deportivo Afición, dio a conocer detalles de su salida.
“Matosas habría dejado claro que hay un grupo de futbolistas que quiere ver fuera del América a cambio de su continuidad: ‘Si no me traen a los tres (refuerzos) que necesito, y se van cuatro o cinco que son tóxicos, me voy’", se lee en el artículo.
Seguidamente se inició un caminar irregular para el DT, ya que por ejemplo en junio del 2015 fue nombrado como entrenador del Atlas; no obstante, ya en noviembre del 2015 por mutuo acuerdo no siguió.
El suramericano consiguió un rendimiento de un 40% a cargo del Atlas gracias a cinco triunfos, dos igualdades y siete pérdidas.
En sus propias palabras aceptó el fracaso: “El proceso en Atlas salió mal”.
Para mediados de 2016 le llegó una nueva oportunidad al nuevo técnico de la Sele, esta vez en el Al-Hilal FC de Arabia Saudita, escuadra en la que solamente duró cinco meses.
En esa ocasión, según ESPN, la inconformidad del uruguayo se dio por una confrontación directa con el dueño del plantel.
“El uruguayo renunció porque el dueño del conjunto árabe le quería imponer las alineaciones, de acuerdo con ESPN. Trascendió que una situación más o menos parecida provocó su salida de las Águilas en 2015, porque Ricardo Peláez, presidente deportivo, no quiso traerle a unos refuerzos y tampoco dar de baja a otros que no agradaban al charrúa”, se lee en una nota de Goal.com.
Para marzo del 2017 Gustavo Matosas decidió aceptar el reto de manejar al Cerro Portero de Paraguay. En este país solamente dirigió durante cuatro meses.
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Los malos resultados se juntaron con la molestia que tenía Matosas porque el plantel estaba concentrado en la construcción de su nuevo estadio y no en rendir deportivamente, ante esto no le dieron los refuerzos solicitados.
Con Cerro llegó al 56% de rendimiento, gracias a siete triunfos, un empate y cinco derrotas.
Como última aventura previo a asumir Costa Rica, el uruguayo decidió ir de junio a setiembre del año anterior a Estudiantes de La Plata de Argentina, donde tampoco consiguió compaginar con algunos futbolistas y dirigencia. Él mismo presentó la renuncia luego de siete partidos disputados.
El exitoso técnico en México ganó tres encuentros con Estuadiantes, empató uno y perdió otros tres, es decir, tuvo un rendimiento del 47%.
“Acá Gustavo duró poco porque el ciclo fue malo, él llegó a un equipo que no estaba bien, pero se le llevaron refuerzos; sin embargo, no terminó de encajar en el grupo. A lo que voy es que le costó hacer química con los referentes y jugadores más importantes del club”, expresó Fernano Serrano, periodista de Radio La Redonda de La Plata.
"Con la prensa tuvo una relación muy cercana y eso no cayó tan bien en el plano dirigencial, porque a veces se filtraron cosas que no debieron filtrarse", añadió.
Así han sido los últimos tres años de trabajo del nuevo seleccionador de Costa Rica: llenos de polémica, enfrentamientos con directivas y cortos periodos de trabajo.
