Jorge Jiménez Deredia salió de Costa Rica hace 43 años. Su magna obra siempre se sintió como propia en el país que le vio nacer y correr por sus cafetales.
Costa Rica ha sido testigo de exposiciones más pequeñas de Jiménez Deredia, sin embargo, a partir del 20 de febrero, los ticos podrán apreciar una exposición que antes se lució en Italia (Florencia, Roma y Lucca) y Ciudad de México.
Se trata de Jiménez Deredia en San José: La fuerza y la universalidad de la esfera; muestra que reúne 27 esculturas monumentales de mármol, granito y bronce. Todas ellas engalanarán la Avenida Central (vea más adelante una guía para saber dónde encontrarlas). Aparte habrá dos exposiciones, de reconocimiento mundial, que se instalarán por cinco meses en el Museo de Oro y en el Museo de Jade (en este último recinto será interactiva y el propio artista dará algunos talleres).
“Es un acontecimiento extraordinario”, afirmó el alcalde de San José, Johnny Araya, durante la presentación oficial de la exposición Jiménez Deredia en San José: La fuerza y la universalidad de la esfera.
Jiménez Deredia, de 64 años, asegura que “regresar (al país) con una exposición de este calibre tiene un significado emocional inmenso”. Para él es un “retorno a sus raíces”.
El artista agrega: “es como desnudarse en su propio país. En los otros países el que llega es el artista con currículum, con historia, aquí llega el chiquillo de los cafetales a traer gran parte de su pensamiento de su obra con las dimensiones que ambos tienen. Esto emocionalmente implica muchas cosas, recuerdos, ver de nuevo a amigos que te veían solo como amigo y no como artista”.
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El presidente de la República, Carlos Alvarado y el alcalde de San José, Johnny Araya anunciaron, la mañana de este 10 de diciembre, los decretos que acreditan como de interés cultural y turístico la exposición; ambos fueron firmados por el mandatario y por la ministra de Cultura, Silvie Durán y de la ministra de Turismo, Maria Amalía Revelo, respectivamente.
Jorge Villalobos, productor de este evento contó que la Municipalidad de San José invirtió ¢40.000.000 solamente en traslado de las obras, contratación de grúas y embalaje. A ese monto hay que sumarle los $100.000 (más de ¢60.000.000) que aportaron entre los patrocinadores Fifco, Bac Credomatic, ICT, Kolbi y grupo INS ($20.000 cada uno) y que fueron utilizados para temas de logística.
Para velar por la seguridad de las enormes piezas, Johnny Araya afirmó que todas las esculturas tendrán medidas de seguridad especiales. En el caso de las de mármol, que son las más delicadas, habrá cámaras de vigilancia y policías municipales y de la Fuerza Pública cuidándolas.
Museo al aire libre
Jiménez Deredia reiteró que traer la magna exposición al país requiere de un enorme esfuerzo, mismo que le conmueve. “Es mi tierra. Eso para un artista significa mucho”.
El artista comentó que esta inmensa muestra es bastante compleja. Para que usted se haga una idea de ello, explica que esta exposición implica mover obras de 60 toneladas, traer transportes especiales desde Italia “porque las obras son muy grandes y no entran en los contenedores”.
“Un pequeño movimiento equivocado en un mármol puede romperlo y significa perder años de trabajo. Entonces, la dimensión que va a tener esta exposición va a ser inmensa: por el tamaño de las obras, los materiales, los lugares en que las vamos a colocar, que requieren grúas especiales para moverlas…”, explicó a La Nación a inicios de noviembre.
Esta exposición amalgama 20 años de trabajo del artista. Además de muy grande, esta exposición “es inclusiva”, asevera.
“Va a permitir entrar en contacto con el arte sin pagar un cinco. El indigente que se queda solo por las noches podrá acompañarse con las esculturas”, dijo durante su discurso.
Aparte de tener un reencuentro con sus raíces, Jiménez Deredia invita a hacer una reflexión sobre nuestra identidad, sobre lo que somos.
“Es decir: sobre ese elemento poderoso que tenemos desde hace 2000 años y que lo habíamos olvidado, que estaba en medio de los bosques, que estaba enterrado, es retomarlo, sacarlo a la luz y descodificarlo porque está lleno de códigos que habíamos olvidado descodificar y nos sentíamos sin raíces. A mí me dijeron, cuando estaba en la escuela, que en Costa Rica no hubo una cultura precolombina, que hubo lugar de paso entre grandes culturas. Mentira: nosotros teníamos una cultura. Había que desenterrarla, descodificarla y ese es un trabajo enorme, el trabajo de una vida que yo estoy trayendo”, dijo a La Nación.
Aparte de lo costoso del traslado y movilización de las esculturas que fueron aportados por la Municipalidad de San José y patrocinadores, Jiménez Deredia no puede cuantificar el monto al que asciende esta obra, pues afirma que es “el esfuerzo económico de toda la vida”.
“Soy un artista que cuando vende una obra no se deja más de un 10 o 20%, todo lo demás va a la realización de nuevas obras. Solamente hago lo que quiero. El dinero me sirve para hacer lo que quiero. Es un instrumento”.
Guía
Le mostramos la ubicación de las esculturas monumentales que presentan la exposición Jiménez Deredia en San José: La fuerza y la universalidad de la esfera.