Ver a Costa Rica desde afuera de sus fronteras puede significar muchos sentimientos: mal de patria, nostalgia familiar, mundo perdido… ¿Cómo se recuerda al país natal cuando el éxodo es por un largo tiempo y las visitas a la tierra de la infancia son cuestión esporádica?
Eddie Mora, director artístico de la Orquesta Sinfónica de Heredia (OSH), se preguntó con intensidad lo que podría significar componer sobre Costa Rica desde afuera de las fronteras.
Así nació una idea que, tras algunos meses de gestión, aparece con particular interés. Mora logró reunir la obra de cuatro talentosos artistas costarricenses que radican fuera del país, para ser interpretadas por el ensamble herediano.
La emoción por este concierto, llamado Costa Rica desde afuera, se agiganta con la noticia de que todas las obras que tocará la orquesta son estrenos mundiales.
La Sinfónica de Heredia interpretará composiciones inéditas de Pablo Chin, radicado en Nueva York; José Mora Jiménez, residente en Holanda; Guido Sánchez Portuguez, quien vive en Illinois, y Andrés Soto, compositor radicado en Nueva Jersey. Para este recital, que es parte de la temporada Latitudes sonoras, el oído de los oyentes estará frente a un visionado muy diferente al usual. Música de compositores jóvenes y costarricenses se sentirá bajo un filtro particular.
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Más allá de las fronteras
Eddie Mora, director de la OSH, se siente muy orgulloso de lo que se está haciendo con el ensamble. El proyecto, para su cuarto programa de la temporada, suele empaparse de temáticas especiales. Para esta oportunidad, Mora siente que el proyecto alcanza otros niveles.
“Es muy interesante saber cómo nos ven nuestros propios compositores desde afuera. Estos compositores no están estudiando ni están en el extranjero por un período corto; es gente debidamente establecida. La orquesta es un punto de encuentro para compositores e intérpretes, así que queremos dedicarle el concierto a todas estas personas que merecen un espacio especial”, afirma el director.
Para este concierto, Mora trató de ser consecuente con su idea hasta sus últimas instancias. En la dirección de la orquesta se encontrará otro costarricense radicado en el extranjero, Luis Víquez, director de la Orquesta de la Universidad de Dakota del Sur.
“Es una oportunidad para continuar con este proyecto que es único en Latinoamérica. La vocación por tener una orquesta con repertorio contemporáneo latinoamericano es algo que se está visibilizando fuera del país”, asegura Víquez.
Luis Víquez, casualmente, fue miembro de la OSH del 2009 al 2012. Fungió como clarinetista principal y, en otras oportunidades, fue solista del ensamble.
“Me encanta regresar a esta orquesta porque este público nunca va a escuchar lo mismo. En el caso para este concierto, tenemos obras muy diferentes”, señala Víquez antes de referirse a las características de cada autor costarricense que presenta obras para el recital.
“En el caso de la obra de Andrés Soto, hay un interés en el contraste en los colores instrumentales; en el caso de José Mora, la característica es el aspecto rítmico y la sensación que provoca; Guido Sánchez explora intensamente las disonancias, todas las armonías no convencionales; y Pablo Chin está muy interesado en técnicas contemporáneas, extendidas en los instrumentos que se incorporan en sonoridades poco usuales”, analiza.
Para Eddie Mora, la fusión de estilos entre los compositores es una metáfora de las distintas maneras en que se puede visionar a Costa Rica.
“A mí me surgió la idea que sería muy bueno no solo incorporar compositores de nuevas generaciones dentro del repertorio, ya que todos tienen un promedio entre 30 y 35 años, sino también contrarrestar las diferentes tendencias de cada uno desde el ángulo donde habitan”, apunta Mora. “Eso refuerza que la música es principalmente un caleidoscopio musical, y la unidad está en la diversidad en cada uno de los lenguajes. A pesar de ser un país muy pequeño, hay un grupo importante de compositores y es bueno saber cómo escuchan a Costa Rica”.
Andrés Soto, autor tico residente en Nueva Jersey, confiesa que componer desde lejos del país da impresiones nostálgicas.
“El hecho de que seamos radicados afuera y volvamos a nuestra patria tiene su propio interés. Llevo 14 años fuera, pero uno nunca le dice adiós a su patria. Cada vez que vuelvo, me siento en casa, me siento conectado. Recargo energías. Hay que cultivar lazos y una oportunidad como esta ayuda mucho”, afirma Soto.
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Aunado a los compositores radicados en el extranjero, la figura del director Víquez complementa la propuesta de Mora, pues cumple con el mismo perfil de los compositores.
“Luis es un joven director y clarinetista de tan solo 30 años. Uno de nuestros perfiles es promover la música costarricense, crear ese repertorio, y tener este tipo de figuras ayuda a ser un empujón para todas las plataformas, con alfabetos diferentes”, señala el conductor.
Por su parte, Víquez no deja de halagar el proceso que desarrolla la OSH.
“Siempre se ve en esta orquesta una programación muy variada. Tienen temporadas muy aventurosas donde se rompen moldes convencionales y, en vez de tocar grandes obras de período clásico o romántico, le dan importancia a otras voces, a compositores vivos”, asegura Víquez. “Sin duda, es una oportunidad para los compositores. Uno como autor espera crecer escuchando la música de acá mismo. Es muy valioso para que la música evolucione”, añade Soto.
Detalles del concierto
La OSH presentará un programa muy especial para este concierto en dos oportunidades.
El ensamble estrenará tres piezas de José Mora, llamadas Uke nage, Iridiscencia y Ecos, también interpretarán Amalgama de Andrés Soto, Atavismos de Guido Sánchez y Si Chavela met Matta de Pablo Chin.
Además, la OSH tendrá el estreno nacional de Nonetto No. 2 de Bohuslav Martinú.
El primer recital será el sábado 21 de julio a las 8 p. m. en la Parroquie Inmaculada Concepción, de Heredia. La entrada es gratuita.
El domingo se presentarán en el Teatro Eugene O´Neill, ubicado en Barrio Dent. El concierto será a las 11 a. m. El costo de la entrada es de ¢1.000. El dinero recaudado se utilizará para el fondo de pago de escuelas de música invitadas por la OSH.
Los boletos se pueden conseguir en el teatro y se pueden reservar en el sitio sinfonicadeheredia.com.
La OSH continuará con su temporada el 28 y 29 de julio, con Eddie Mora a la batuta del ensamble en la Parroquia Nuestra Señora Inmaculada de Heredia y el Teatro Eugene O´Neill.