Desafiar la presión de su compañeros de la Liga de la comedia y dominar los zapatos de baile que le parecen tan incómodos, serán los dos principales retos que el locutor Jair Cruz deberá enfrentar este domingo, cuando debute en la pista de Dancing with the stars.
El también comediante asegura que nunca se ha enfrentado a un reto igual, pero confía en que los ensayos de toda esta semana sean suficientes para dar un buen espectáculo en El baile de las estrellas.
“Nunca en mi vida he bailado absolutamente nada y la experiencia ha sido bastante interesante. No es fácil arrancar de cero, hay que aprender a contar, hay que aprenderse pasos, hay que hacer coordinaciones y un montón de cosas que no son de la vida cotidiana de uno, pero creo que uno tiene que ponerse retos y si otros lo hacen, ¿por qué yo no?”, cuestionó el locutor de El Mañanero.
El locutor contó que en el público lo estarán apoyando sus dos hijas mayores María Angélica y Valeria, quienes desde ya se sienten nerviosas por el jive que presentará al lado de la bailarina Alhanna Morales, ya que “yo les digo que no esperen mucho de mi”.
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Pero al igual que ellas, Jair asegura que a lo largo de esta semana carga con una presión psicológica y en momentos el nerviosismo se apodera de él y responsabilizó a sus amigos de La liga de la comedia, Gustavo Gamboa, Renzo Rímolo, Adrián Granados y Gustavo Peláez (quien es una de las figuras en competencia), por ello.
“Me han basureado toda la semana, porque cuando tuvimos una presentación con Peláez yo fui el peor, el que descoordiné, el que nunca salió a tiempo, entonces toda la semana me han dicho que todo se me va a olvidar en el momento y además de todo, que yo voy a ser el gato negro para que Peláez salga el domingo de la competencia, entonces tengo esa presión psicológica”, afirmó.
Jair tampoco le cierra las puertas a participar eventualmente como una de las estrellas de ese programa, ya que pese a los dolores de brazos y piernas, a las alzadas y a que las zapatillas han sido para él muy incómodas, ha disfrutado la experiencia.
“Yo estoy enamorado de la experiencia, de verdad que es muy tuanis, aunque han sido días cansados y adoloridos, han valido la pena. Creo que a una competencia como estas hay que dedicarle tiempo completo y de verdad que uno lo disfruta: se ríe cuando se golpea, cuando se cae y hasta cuando le salen las cosas bien”, dijo.
Este domingo será la semifinal de la quinta temporada de Dancing with the stars y al igual que Peláez, Johanna Solano, Keyla Sánchez, Viviana Calderón y Jecsinior Jara se disputarán un puesto para estar en la gran final del exitoso programa.