El pianista y director de orquesta Daniel Barenboim, un ferviente activista por la paz en Medio Oriente, afirmó que siente “vergüenza de ser israelí” por la reciente sanción de una ley que define a Israel como el estado nacional del pueblo judío y que según sus críticos ignora a las minorías.
“Tenemos ahora una ley que confirma a la población árabe como ciudadanos de segunda clase. Es entonces una forma muy clara de apartheid” , denunció el artista, argentino por nacimiento pero nacionalizado israelí, en una columna de opinión publicada el lunes por el diario La Nación de Argentina y un día antes por el periódico Haaretz de Israel.
La norma en cuestión fue sancionada el pasado jueves por el parlamento israelí y según el gobierno de Benjamin Netanyahu da fuerza de ley al carácter que ya tiene Israel desde su fundación en 1948 como estado nacional del pueblo judío. Los opositores a la nueva legislación denunciaron que margina a la minoría árabe del país –alrededor del 20% de la población– y degrada el idioma árabe de oficial a tener una posición “especial” .
“No creo que el pueblo judío haya vivido veinte siglos, entre persecuciones y el sufrimiento de crueldades infinitas, para convertirse ahora en opresores e infligir la crueldad a los otros. Esta nueva ley hace exactamente eso. Por eso hoy me da vergüenza ser israelí” , señaló Barenboim, quien se encuentra de gira en Buenos Aires.
El pianista de 75 años creó en 1999 junto al escritor estadounidense-palestino Edward Said la orquesta West-Eastern Divan, integrada por jóvenes músicos de origen israelí y árabe para promover a través de la música la paz en Medio Oriente.
Una década después Barenboim adoptó la ciudadanía palestina honoraria, primer caso en el mundo con ciudadanía de ambos países.