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¡Roger Waters ya está aquí! Un grupo de seguidores le dieron la bienvenida cuando arribó a las 3:40 p. m., de este 22 de noviembre, en la terminal doméstica del Aeropuerto Juan Santamaría. El exbajista de Pink Floyd llegó en un vuelo privado.
Los detalles de la llegada fueron brindados por Helen Feigenblatt, una funcionaria del aeropuerto y además, fan asidua de Roger Waters y Pink Floyd. En los días previos a la llegada del artista británico, ella averiguó la terminal por la que el avión llegaría para ver a Roger Waters bajar.
En teoría, Waters llegaría a Costa Rica a las 2 p. m., procedente de Bogotá, Colombia, sin embargo, hubo un retraso que nada importó a Helen ni a los otros ocho fanáticos quienes integran el grupo Pink Floyd Costa Rica, que le acompañaban.
“Un amigo que tiene contactos aéreos fue quien nos precisó la hora en la que llegaría Roger Waters”, dijo Marco Monge un fanático del británico.
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“Es un honor que él esté en el país”. “Cuando lo recibimos nosotros no pudimos reaccionar”. “Yo logré tomarle una foto y me temblaban las piernas”. Dijeron tres fanáticas, una tras otra, emocionadas tras haber visto a su ídolo. La productora del concierto confirmó a Viva que el músico ya está en Costa Rica.
Para recibir al británico, de 75 años, los fans se organizaron días antes. Personalmente algunos sacaron el día libre y otros acoplaron el plan en su cotidianidad. Stephanie López dice que ella salió corriendo del trabajo, Natalia Chavarría estaba disponible desde las 10 a. m., cuando terminó sus clases en la universidad, y Hellen se esperó en el aeropuerto, pues terminó su jornada a las 2 p. m.
“El mae salió y no pudimos hacer nada, no sé cómo logré sostener el poster que llevaba. Que quede en la historia que somos los primeros fans de Pink Floyd que lo vieron llegar a Costa Rica”, dijo Martín Fallas, un vehemente seguidor de Pink Floyd y Roger Waters.
Al descender del aeroplano, Waters volvió a ver a los fans, sin embargo, Hellen dice que no hubo reacción por parte de ninguno, en el caso de los fanáticos porque “se quedaron en shock”.
“Queríamos gritarle Welcome, o algo, pero nos quedamos congelados de la emoción”, añadió Helen Feigenblatt.
En busca de un selfie y autógrafo
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Aparte de verle llegar, los chicos, con edades entre los 20 y 30 años, querían algo más del artista: específicamente fotos o autógrafos, por ello, salieron hacía un hotel en Escazú donde el cantante se hospeda previo al concierto que ofrecerá en sábado 24 de noviembre en el Estadio Nacional.
Desde las 5 y hasta las 8:30 p. m., los fanáticos se instalaron en el lobby del hotel con acetatos y posters con la fe de que el artista bajara a saludar.
Desafortunadamente no fue así y se devolvieron a sus casas, eso sí, con la esperanza de regresar este viernes 23 en la mañana, porque según cuentan, una integrante del equipo productor del concierto les dijo que quizá “salga a saludar”. Por supuesto, los fans prometen estar allí.
Waters se hospeda en la suite presidencial del recinto escazuceño. Él cuenta con seguridad privada y también la del hotel.
