Ni la lluvia ni el viento han detenido los trabajos en el Estadio Nacional para levantar el monumental escenario que albergará el concierto de Roger Waters.
"La planeación del montaje incluyó la lluvia así que estamos bien preparados para lo que venga”, comentó Arlette Arroyo, productora costarricense de Move Concerts.
Ella era una de las encargadas de dirigir a las 250 personas que trabajaban este lunes en esta estructura, ubicada en La Sabana.
Los trabajos comenzaron hace una semana y continuarán día y noche durante los próximos días, con el fin de que todo esté listo para el concierto de este sábado a las 7 p. m.
Este lunes decenas de trabajadores estaban montando los andamios que sostendrán el escenario y la pantalla gigante, de 74 metros de ancho. Asimismo, los vendedores de comida empezaron a asentarse y se preparó la pasarela por la que Waters subirá al escenario.
Para lograr el sistema de sonido envolvente que trae la gira (y que se experimentará por primera vez en Costa Rica), se colgaron en los alrededores del estadio, en lo alto, siete sistemas de audio.
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Esta noche llegarán al país tres contenedores con varias torres de sonido que le agregarán 12 sistemas de audio extra, para un total de 19.
“Vamos dos días adelante. Esperábamos tener las repetidoras (de audio) hasta hoy lunes y ya están arriba. En los próximos días montaremos el techo y luego la superficie del escenario”, comentó Arroyo.
El jueves 22 se cubrirá la gramilla del estadio para iniciar la colocación de sillas. El viernes 23 se montará la famosa pantalla que trae el artista, para lo cual se requerirán 76 personas para lograrlo.
Waters quiere arroz y frijoles
Se espera que Roger Waters y una comitiva de 125 personas lleguen al país este viernes.
El día del concierto, el artista estará en el estadio desde horas de la tarde, por lo cual se habilitarán espacios para practicar yoga y una sala de masajes para relajarse.
La producción de Move Concerts alimentará a esas 125 personas y a otros miembros del equipo que tienen peticiones especiales: comida vegetariana, pescetariana, vegana y otros.
Arlette Arroyo resaltó que la comida de Waters tenía una petición muy sencilla, quizá demasiado. “Lo tengo en papel, parece mentira: solo pidió arroz y frijoles. Estábamos pensando en todo tipo de platos y él pidió lo más sencillo”, comentó.
Ella subrayó que el país nunca ha visto una producción como la que están realizando. El concierto del sábado, repitió, será una experiencia única.