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La quinta gala de Dancing with the Stars estuvo llena de muchas emociones y diversión, en la que los niños fueron los principales protagonistas. El programa de este domingo, que llevó por nombre Noche de fantasía, buscó rendirle tributo a todas esas películas infantiles que han conquistado distintas generaciones y que ocupan un lugar especial de nuestra memoria.
A lo largo de las dos horas que duró el espectáculo, el público presente en el estudio Marco Picado, en Teletica, fue invitado especial en un viaje por la nostalgia y la ilusión que se tiene cuando se es pequeño y se cree que todo es posible. Lo importante para muchos, esta noche, fue cumplir su sueño de expresarse todo por medio del baile.
Muestra de ello fueron las dos parejas de niños que inauguraron la pista, esto como parte de la nueva competencia exclusiva para los más pequeños de la casa. Durante esta y las próximas cuatro semanas, se escogerá a una dupla de finalistas que buscará alzarse con el trofeo en la final y se llevará consigo un premio de un millón de colones.
Los primeros en demostrar su talento en Mini Dancing fueron Samuel Jaén y Luciana Garnier, de 13 y 10 años respectivamente. Ellos interpretaron al ritmo de cha cha la canción Quiero mover el bote, que forma parte del soundtrack de la película Madagascar y con la que sellaron su boleto a la gala final.
“Tenemos más de una semana trabajando fuertemente en el aprendizaje de la coreografía y ha sido una experiencia muy divertida. No nos conocíamos, hasta que llegamos a los ensayos, pero nos llevamos muy bien y creo que eso se vio en la pista. Si nos ganamos el premio, a mí me gustaría darle la mitad a una familia con escasos recursos que conocí gracias a mi mamá”, expresó Luciana, quien es hija de Karine Niño, diputada de Liberación Nacional.
Su pareja en la pista, Samuel, vecino de San Miguel de Santo Domingo de Heredia, aseguró sentirse muy feliz de tener esta oportunidad, ya que en el baile ha tenido la oportunidad de poder expresar sus emociones, esto desde que estaba en el kinder.
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“Estoy muy feliz por tener esta oportunidad. No conocía a Luciana antes de comenzar los ensayos, pero creo que lo que nos une es la pasión que tenemos los dos por el baile y eso se refleja en lo que hicimos. Es una experiencia distinta, pero muy emocionante”, dijo Jaén.
Minutos antes de salir al escenario por primera vez, la diputada Karine, su hijo mayor Matías Garnier, además de su esposo Christian Garnier, estaban pendientes de todos los detalles de la actuación de Luciana, quien en abril del 2017 tuvo la oportunidad de viajar a Panamá para bailar junto al cantante Justin Bieber.
“Desde que ella nació, ha demostrado ser una verdadera luchadora, porque llegó a este mundo con una condición de salud complicada. Todo lo que se ha propuesto lo ha conseguido, además de que en baile ha podido desarrollar una de sus más grandes pasiones. Fue una semana un poco complicada, en especial por el tema país que atravesamos en estos días, por lo que costó un poco coordinar. Sin embargo, lo logramos, y cuando la vi ayer en el ensayo, no pude contener las lágrimas”, afirmó la diputada.
La segunda pareja en competición fue la compuesta por Beysell Díaz y Sara Fonti, de 13 años y nueve años, quienes también al ritmo de cha cha bailaron el tema Can’t Stop the Feeling, de la película Trolls. Los niños aseguraron sentirse sumamente agradecidos de tener la oportunidad de formar parte de Dancing with the Stars, aunque sea durante una semana,
“Fue algo realmente inesperado y sorpresivo cuando me dijeron que me habían seleccionado para este concurso de ballroom, aunque debo decir que lo que más me gusta bailar es hip hop. Me costó un poco adaptarme a un género como el cha cha, pero me gustó la experiencia”, comentó Díaz.
Recuento
La quinta gala de Dancing with the Stars mostró a las nueve parejas en competencia en distintos personajes de películas infantiles. Precisamente, la noche inició con la empresaria Amanda Moncada interpretando a Cruela de Vil, del filme 101 dálmatas, junto a Billy Corado.
Por su parte, la boxeadora Yokasta Valle se divirtió como Moana, mostrando una faceta mucho más relajada, aunque confesó sentirse un poco extraña con el estilo contemporáneo, “ya que ella es mucho más activa”, por lo que controlar su energía no fue nada fácil.
En el caso de Jecsinior Jara y Lucía Jiménez, dieron vida a la famosa canción Bajo del mar, de la película La Sirenita, acompañados de unos peculiares peces, quienes “nadaban” en patines. El siguiente turno en la pista fue para Pablo Rodríguez y Alhanna Morales, con el filme El Rey León.
El exdiputado Óscar López y su pareja de baile, Tatiana Sánchez, bailaron el tema Recuérdame, de la cinta Coco, mientras que Keyla Sánchez y Michael Rubí llenaron de sensualidad el escenario a ritmo de samba con el soundtrack de la película Río.
Uno de los momentos más emotivos de la noche llegó con la presentación de Víctor Carvajal, vestido de Mario Bros, que bailó al ritmo de slow vals junto a la mexicana Jahzeel Acevedo. Al finalizar su baile, el conductor del espacio De boca en boca agradeció, con lágrimas en los ojos, que su papá estuviera en el público viéndolo.
“Hace un año, mi mamá estaba aquí, en el estudio, viéndome, pero hoy lo hace desde el cielo. En cambio, hoy tengo la dicha de tener a mi papá, aquí, conmigo, así que estoy muy agradecido”, fueron las palabras de Carvajal, ganador de la cuarta temporada de Dancing.
Al finalizar, el presentador se acercó hasta la gradería en la que estaba su padre, Víctor Carvajal y quien tiene 90 años, para agradecerle con un abrazo su presencia.
Johanna Solano y Kevin Vera revivieron el clásico de Aladín, permitiendo que la ex Miss Costa Rica cumpliera su sueño de interpretar a la princesa Jazmín. El mismo sentimiento tuvo Viviana Calderón, quien le hizo realidad una de las más grandes fantasías de su hija, Giuliana Lizano, al darle vida a Elsa, de Frozen.
El cierre de la noche fue para el locutor de radio Gustavo Peláez, que junto a Yessenia Reyes, recrearon la saga de Piratas del Caribe, esto al ritmo de tango.
La tabla de esta fecha quedó liderada por Johanna Solano, con 27 puntos: seguida por Keyla Sánchez y Viviana Calderón, con un total de 26 con puntos.
Esta fue una gala llena de muchísimas emociones, ilusión y fantasía, en la que más de un sueño se pudo hacer realidad, tanto dentro como fuera de la pista de baile.
